Seguimos aprendiendo a conocer y cuidar nuestras emociones 💖. Esta semana hemos trabajado lo que sentimos cuando nos enfadamos o tenemos rabia, y sobre todo, cómo podemos calmarnos cuando esas emociones se ponen un poco “revoltosas” 😤➡️😌.
Para ayudarnos, hemos creado nuestro propio "Tarro de la Calma", un precioso bote lleno de purpurina y mucha paciencia ✨. Al agitarlo, las “emociones brillantes” se mueven por dentro como si estuvieran enfadadas, pero poco a poco se van posando en el fondo… igual que nosotros cuando respiramos hondo y nos serenamos. 🌈
Ha sido una experiencia mágica y relajante: mientras decorábamos nuestros tarros, hablábamos de lo que nos ayuda a tranquilizarnos y a pensar antes de actuar. 🧠💛
Ahora, cada vez que algo nos saque de quicio, solo tendremos que mirar nuestro tarro y recordar que la calma también se entrena… ¡y brilla mucho más que la rabia! 🌟
No hay comentarios:
Publicar un comentario